Ya hemos mencionado que se podía girar al bebé de forma manual cuando este no venía en la posición adecuada para dar a luz. Los giros se realizan entre la semana 36 y la 38 aproximadamente y solo cuando se tiene la certeza de que hay una gran probabilidad de éxito.
Las condiciones idóneas para el giro manual del bebé son que haya bastante líquido amniótico y la barriga no esté muy tensa, que el bebé se pueda mover con facilidad y que la madre aún no haya tenido contracciones. Además, no se podrá realizar un giro manual en los siguientes casos: embarazo múltiple, rotura de aguas prematura, cordón umbilical enrollado o con nudos, placenta previa en la madre, malformaciones del útero o problemas en el bebé.
En cuanto a la maniobra de giro manual del bebé, debes ser informada por el médico y tener en cuenta posibles complicaciones. Se debe realizar en un hospital o centro de salud, con un ambiente tranquilo. La madre debe ir en ayunas y estar lo más tranquila posible. Se tumbará en la camilla con la pelvis elevada gracias a unos cojines. El médico, por su parte, mediante una ecografía comprobará la posición exacta del bebé y la matrona (durante la maniobra) comprobará el latido del corazón. Puede que se administre un inhibidor de contracciones si estas aparecen durante la operación. En el siguiente vídeo os mostramos en que consiste la maniobra descrita:
El giro manual dura un promedio de dos minutos y si la madre tiene dolor se para inmediatamente. Si todo sale bien se comprueba la posición del bebé y el latido cardíaco y se seguirá controlando en días posteriores. También se realizará una cardiotocografía para descartar complicaciones después de la maniobra.
Esta maniobra tiene una probabilidad de éxito del 50%. Son algunas las complicaciones que pueden ocurrir durante el giro manual del bebé por eso algunos médicos no son partidarios de hacerlo.
Para más información os dejamos esta página de consulta.
Las condiciones idóneas para el giro manual del bebé son que haya bastante líquido amniótico y la barriga no esté muy tensa, que el bebé se pueda mover con facilidad y que la madre aún no haya tenido contracciones. Además, no se podrá realizar un giro manual en los siguientes casos: embarazo múltiple, rotura de aguas prematura, cordón umbilical enrollado o con nudos, placenta previa en la madre, malformaciones del útero o problemas en el bebé.
En cuanto a la maniobra de giro manual del bebé, debes ser informada por el médico y tener en cuenta posibles complicaciones. Se debe realizar en un hospital o centro de salud, con un ambiente tranquilo. La madre debe ir en ayunas y estar lo más tranquila posible. Se tumbará en la camilla con la pelvis elevada gracias a unos cojines. El médico, por su parte, mediante una ecografía comprobará la posición exacta del bebé y la matrona (durante la maniobra) comprobará el latido del corazón. Puede que se administre un inhibidor de contracciones si estas aparecen durante la operación. En el siguiente vídeo os mostramos en que consiste la maniobra descrita:
El giro manual dura un promedio de dos minutos y si la madre tiene dolor se para inmediatamente. Si todo sale bien se comprueba la posición del bebé y el latido cardíaco y se seguirá controlando en días posteriores. También se realizará una cardiotocografía para descartar complicaciones después de la maniobra.
Esta maniobra tiene una probabilidad de éxito del 50%. Son algunas las complicaciones que pueden ocurrir durante el giro manual del bebé por eso algunos médicos no son partidarios de hacerlo.
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