jueves, 18 de diciembre de 2014

AUTISMO


Es una enfermedad crónica que afecta al desarrollo psícosocial del niño. Aparece durante desde el nacimiento o en los primeros meses de vida.

Realmente la causa que los origina es desconocida aún así se cree puede darse por causas genéticas (cromosómicas), virus, debido al metabolismo, intolerancia a alimentos o falta de oxígeno durante el nacimiento.



SÍNTOMAS

En bebés (aunque los síntomas descritos pueden ser acompañados de otras patologías o en bebés totalmente normales, es por ello que no siempre son significativos a esta edad).
  • Llorar y gritar continuamente.

  • No llorar nunca y demasiada tranquilidad.

  • Golpes con la cabeza contra el carrito o la cuna.

  • Demasiada atención a objetos muy llamativos y falta de interés por personas de su entorno.

A partir de un año en adelante: 
  • Dificultad y/o retraso en el lenguaje, ecolalia (repetición excesiva de las mismas palabras).

  • Falta de comunicación con otras personas. La persona autista no se relaciona con otras personas. Las mira cortantemente y de rehojo. No se imuta con ruidos fuertes aunque a determinados sonidos se muestra muy sensible hasta el punto de que parece que le daña el oído.

  • Agresividad hacia si mismo y los de su entorno.

  • Demasiado poco interés por determinadas cosas o hiperactividad.

  • Movimientos repetitivos con las manos o cabeza.

  • Rechazo al contacto físico con otras personas u objetos.

  • Buenas habilidad con el arte y la música.
TRATAMIENTO

No hay un tratamiento específico para la cura de esta patología, pero sí se pueden hacer algunas terapias psicológicas que ayuden al niño. 

Terapia de juegos: jugar aprendiendo, se le aprende el lenguaje y se le enseñan cosas.

Terapia conductual: utiliza el castigo para dar mayor respeto frente al educador, pero da sus resultados.

Terapia de castigos: Es una terapia aplicada a los niños autistas que se pueden dañar seriamente mediante la autolesión, se dice que los castigos aplicados hacen menos daño que la propia autolesión del niño. 

Terapia con relatos sociales: Historias narradas donde se le aprende al niño a gesticular con las manos y el cuerpo (comunicación no verbal). 

Terapia de dibujo: Enseñar al niño a dibujar para que pueda hacer intercambio de él con otros objetos. 

Terapia sensorial: Como los niños autistas tienen muy desenvolvidos los cinco sentidos, se ponen a prueba los niños para que controlen más sus miedos (balanceo, alturas, giros...).

Terapia con delfines: Se trata de la terapia en piscinas con delfines. 


Para reducir la hiperactividad del niño se recomienda el suministro de Vitamina B6 y Magnesio.

Se aconsejan dietas con alimentos con déficit de la proteína de la leche (caseína) y sin gluten. La proteína de la leche les induce a tener dolor de oídos, lloros y gritos continuos; y los niños intolerantes al gluten se identifican con difíciles deposiciones y estreñimiento. 


Para más información puedes pulsar en este link y leer la siguiente información.

No hay comentarios:

Publicar un comentario