Antes,
cuando nos decía que nuestro bebé tenía algún problema antes de nacer, no había
solución posible, por lo menos hasta que saliese del vientre de la madre. Ahora
afortunadamente si nuestro bebé presenta algún problema cuando todavía es un
feto en muchos casos, tiene solución. Esto es gracias a la cirugía fetal.
Estas
cirugías empezaron a hacerse en España en los años 90. Es muy poca la
proporción de niños que necesitan este tipo de operaciones, pero gracias a
ella, pueden curarse o retrasar una malformación antes de su nacimiento.
Estas
intervenciones no son fáciles, ya que el feto es muy pequeño y además hay que
atravesar todos los líquidos y membranas sin dañarlas. Siempre se hacen a
través de endoscopia o fetoscopia. Los instrumentos utilizados son mucho más
pequeños que los de una endoscopia en adultos dado el tamaño del feto. Estas
operaciones se realizan a partir de las 15 semanas.
Existen más o menos unos 14 tipos de intervenciones para tratar diversas patologías en niños que todavía no han nacido, y aunque son muy pocas las cirugías que se hacen de este tipo, los equipos médicos cada vez están más desarrollados.
Gracias a
la cirugía fetal, se les ofrece una oportunidad de vida a niños que antes no la
tendrían.
Si queréis
saber más sobre este tema, os dejo el link de una web especializada en este
tipo de cirugías.
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