Cuando unos padres van a tener un bebé, siempre hay una duda que trae a todos de cabeza, una pregunta que oímos casi todos los días mientras se está esperando, ¿va a ser niño o niña? Hay quien decide esperar al nacimiento del bebé para saberlo, y hay quien quiere saberlo nada más saber que está esperando un hijo.
Pues
bien, lo normal es que el sexo del bebé se sepa más o menos a los 4 meses de gestación,
aunque hay técnicas para los más impacientes que pueden llegar a saberlo a los
dos meses.
La forma
más habitual y la más segura es hacerse un ultrasonido, aunque de esto depende
la posición en la que se encuentre el bebé en el momento de la prueba. Si el técnico
es muy experto y el aparato de ultrasonido con gran calidad se puede adivinar
el sexo del bebé incluso en la semana 11.
Otra
prueba distinta es utilizar un análisis de sangre para ver si en la sangre de
la madre hay algún cromosoma Y, lo que nos indicaría que es un niño. Esta
prueba tiene una alta tasa de aciertos.
Actualmente
hay una prueba que es el análisis de orina casero, aunque todavía no está muy
contrastada su fiabilidad sus creadores dicen que tiene un 90% de posibilidades
de acierto del sexo del bebé.
Así
que, para los que no pueden esperar al nacimiento del bebé para elegir el
nombre o comprar la ropa, existen diversas técnicas que nos permitirán saberlo
e ir haciendo los preparativos.
Si quieres
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