Después
de dar a luz, puede aparecer en la madre una depresión post parto. Normalmente aparece
los 3 primeros meses después del nacimiento del bebé, aunque en ocasiones puede
darse hasta un año después.
No
existe una única causa para esta depresión, ni tampoco está especificada, si no
es en un conjunto de factores que pueden llevar a esta situación. Factores como
el cambio del cuerpo, cambios en las relaciones y en la vida social y laboral,
y como afrontar el ser madre.
Las mujeres
jóvenes, que han sufrido antes crisis de ansiedad, en las que el embarazo ha
sido sin premeditación, con falta de apoyo social y familiar, madres solteras,
e incluso con problemas de dinero, son las que tienen más probabilidades de
sufrir este tipo de depresión.
Estas
mujeres, se encuentran con un gran inconveniente cuando sufren este tipo de depresión,
ya que para los médicos es difícil diagnosticar si se trata de un cambio hormonal
o de una depresión post parto, y la sociedad, a veces le hace a una madre más difícil
salir de esta situación ya que no entienden que una persona que acaba de tener
un bebé pueda sentirse triste e incluso llegar a rechazar al niño o niña.
¿Cómo
tratar estas depresiones? Lo primero que
hay que hacer si se sospecha de que se puede tener una depresión post parto es
comunicarlo con el personal sanitario. Ellos ayudarán mejor que nadie. Algunas
de las sugerencias que les van a dar serán: pedir ayuda con el cuidado del
bebé, intentar sacar tiempo para una misma, salir de casa y relacionarse con
otras madres que puedan estar pasando por lo mismo, acudir a grupos de apoyo o
en los casos más graves se podrá recurrir a la medicación.
En
cualquier caso, siempre que se sospeche de un principio de depresión, lo mejor
es pedir ayuda cuanto antes, para evitar que vaya a más y poder superar esa
situación con mayor facilidad.
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