La mayoría de las mujeres quedan embarazadas durante los
primeros 3 meses de intento (un 59%), un 80% de las mujeres quedarán en los
primeros 6 meses y un 85% durante el primer año. Hay que tener en cuenta que
estos porcentajes se ven influenciados según; la edad de la mujer, ciertos
hábitos (como fumar) o distintas enfermedades que pudiera padecer la mujer.
Se estima que alrededor del 90% de las parejas conciben de
manera natural, sin necesitar ningún tipo de ayuda. Sin embargo, un 10% solicita
ayuda para concebir, aunque probablemente estas no hayan intentado durante
un tiempo suficiente, ya que se estima que entre el 93-95% de las mujeres
podrían quedar embarazadas sin ayuda. Otro bajo porcentaje acaba solicitando
ayuda mediante fecundaciones in vitro,
donaciones de semen, adopciones…
Hoy en día
si una mujer intenta, durante un año, quedarse embarazada sin obtener resultado,
se indica que busque ayuda especializada para valorar, mediante posibles
pruebas, que no exista ningún problema de fertilidad en la pareja.
Es
importante saber que existen algunas medidas que se pueden llevar a cabo, para
mejorar y acelerar la concepción.
Algunas de estas medidas son; saber el día de ovulación y sincronizar el sexo
con estos días, el buen estado del esperma (el abuso de alcohol, fumar, baños
muy calientes, saunas… pueden empeorar la calidad del esperma), que la mujer
llegue también al orgasmo puede resultar más importante de lo que se pensaba (puesto
que las contracciones que se producen en la vagina ayudan a que el semen
ascienda hasta el cuello del útero), incluso algunos autores creen que algunas
posturas (como el misionero), ayudan a concebir aunque no existen estudios que
puedan afirmar esto.
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